diumenge, 26 de novembre del 2017

Refajos de lana

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La mejor forma de vestirse a la antigua es copiar lo más fielmente posible piezas históricas. Por ello, es imprescindible conocer de primera mano cómo eran las ropas de nuestros antepasados. Cuantas más prendas originales conozcáis mejor. Pero no solo eso. Hay que saber cuándo y dónde se usaron y para qué. En ese sentido, la labor de un aficionado a la cultura popular se parece a la de un historiador.


Y como el saber no sirve de nada si no se comparte, he decidido hacer esta entrada donde veremos los distintos tipos de faldas de lana que se usaron en el siglo XIX en nuestra comarca y en otros lugares. Usaré la denominación refajo, porque aunque no sea la más genuina, es la que usamos actualmente, a pesar de que si hacemos caso a su primera definición, aparecida en el diccionario de la RAE en 1803, se aplicaba a las faldas del norte peninsular, que son abiertas y se colocan sobre otras (como una especie de delantal pero tan grande que se solapa o faja sobre la otra falda).





Los refajos más abundantes en nuestra zona fueron los de paño liso. En Énguera, pueblo de tixiôres,  se producían paños de excelente calidad. La lana era un material muy al alcance de nuestros antepasados. El hecho de que las piezas se usaran durante varias generaciones o se reaprovecharan los tejidos al máximo explica que no conservemos los ejemplares.



Por suerte, sí que hemos conservado en La Canal bastantes ejemplares de refajos de rayas, tanto horizontales como verticales. 

Conservado en Énguera

Procede de Énguera. En origen estaba plisado.

Con los colores más habituales en Énguera, pero con rayas verticales.

Refajo conservado en Chella, de tonos rojos y blancos.
Los refajos de rayas horizontales suelen llevar el llamado peto en la zona superior, donde se alternan solo dos o tres colores:
Detalle del peto del refajo conservado en Chella
Este tipo de refajos fue una prenda usada en muchas zonas peninsulares.
Refajo plisado conservado en Monóver, de tonos rojos.
Ejemplar de listas sin labrar. MUVAET

Con rayas labradas. Fondos del MUVAET

Fondos de la casa Insa (MUVAET). És possiblement una falda d'un vestit canari

Otro tipo de refajos bastante abundante es el estampado. Los más antiguos tienen tres cenefas y los más modernos solamente una. Los fondos son de color lana cruda, rojo, amarillo o verde.


Estampado sobre bayeta. Conservado en Énguera
Estampado sobre bayeta. Procedente de las Casas de Benali (Énguera)
Estampado sobre paño de lana en color crudo. Conservado en Énguera.
Ejemplar del MUVAET, con dos cenefas estampadas sobre paño amarillo.
Colección Pilar Higón. Procede de anticuario, origen desconocido.

Siempre se ha dicho que "el trabajo es el lujo del pobre". Así que algunas mujeres enriquecían sus refajos con bordados.  No conozco ningún refajo bordado enguerino pero no podemos descartar que existiera este tipo de falda. Ojo que no todo vale: Una cosa es bordar un refajo y otra cosa es tapar el tejido con unas cenefas exageradísimas o con un diseño propio de una mantelería moderna.


Refajo bordado. Fondos del MUVAET
Refajo conservado en Murcia, bordado en colores sobre listas verticales.

Algunos refajos de rayas verticales se tejían con cenefas horizontales de colores para imitar el efecto del tipo anteriormente comentado.

Detalle de cenefa tejida. Conservado en Énguera.


Con cenefa tejida. Fondos del MUVAET
También había refajos de otros tejidos de lana, como los de cuadros o tartán.
Refajo de cuadros, con volante bordado y recortado en ondas. Énguera
Otro tipo de refajos se adornaban con tiranas de terciopelo o cenefas recortadas y cosidas sobre el paño.
Refajo enguerino con cenefa de terciopelo

Los refajos suelen llevar un forro interior en la parte de abajo que se llama ruedo. También van rematados en la orilla con cordón de lana o alguna trencilla. Algunos pocos llevan una tira bordada, que imaginamos que se debe a una transformación posterior para usar el refajo como prenda interior de abrigo.



Si os animáis a vestiros a la antigua ya sabéis que no vale cualquier cosa. Los gustos actuales son diferentes de los de nuestros antepasados por lo que si queremos imitar su manera de vestir tendremos que ajustarnos a su moda, no a la moda actual. Puede que no sea sencillo encontrar los tejidos adecuados para reproducir las piezas antiguas ni todas las personas sepan  confeccionar a la manera tradicional, pero no es imposible... 

Más información a http://collabrials.blogspot.com.es/2014/08/faldellins-de-llana.html
Conservado con la cintura descosida para poder reaprovechar el tejido. MUVAET

1 comentari:

  1. Una variedad muy grande de modelos, y aunque algunos presenta algún deterioro por el uso hablan claro de su antigüedad. Veo muy acertado el trabajo con respeto a la verdad y a la tradición. Enhorabuena.

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